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Resumen:
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Nicolás Tizio, con un valioso conjunto de colaboradores y portando la más moderna tecnología, recorre intrincados resabios de naturaleza para, con su linterna mágica, fotografiar la intimidad de las aves. Lo lleva la convicción de que podemos recuperar ese perdido idioma que comunica a toda la grey animal, hoy con nuestra excepción. Para eso capta los rostros de las aves. El pico nos habla de su alimentación, de su ubicación taxonómica, pero sus ojos, así lo entiende, poseen el mensaje secreto que nos devolverá nuestro lugar, antes de que sea demasiado tarde. Con el fin de alcanzar un paso intermedio -pero aún así nada sencillo- que es hacerse entender entre los suyos, Tizio ha convocado a Tito Narosky, un reconocido naturalista, autor de decenas de libros y cientos de artículos conservacionistas. El equipo así formado, requiere ahora de un esfuerzo divulgativo de sus pares. De ustedes. De vos. Para que el mensaje cunda.
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