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Resumen:
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Viajamos. Tú y yo, ellos. Todos. Viajamos aun sin movernos de lugar, aun estando quietos, hasta dormidos o inconscientes. Viajamos en un tren que no tiene ni rieles, ni silbato, ni maquinista. Es un tren silencioso e invisible; no conoce paradas, ni estaciones, ni llegada. Viajamos. Tú y yo, ellos, todos, viajamos en el tren del tiempo. De lugar en lugar, de mundo en mundo, de un instante al otro, del ayer al mañana, de la juventud a la vejez, de una vida a otra. De las vidas anteriores traemos un pesado bagaje: nuestras angustias. Nos oprimen el pecho, como marcadas a fuego, pero no sabemos a qué atribuirlas. ¿Nos liberaremos de ellas alguna vez? ¿Podremos volar libremente, sin ataduras, hacia el infinito?
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