Resumen:
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El presente estudio de investigación pretende re-mirar las práctica/s de cuidados paliativos desde una perspectiva humanística sustentada por la teoría de Watson con orientación fenomenológica, existencial, espiritual, referenciando al sentido del compromiso ético, considerando las cualidades interpersonales y transportables de coherencia y empatía. El objetivo general del estudio es describir la/s prácticas de cuidados paliativos enfermeros que se estén evidenciando o realizando en los últimos 3 años. Los específicos son: Describir práctica/s de cuidado que propicien la toma de decisión/es, escucha y espiritualidad para la terapéutica con la persona/s, familia/s y el equipo interdisciplinario. La metodología de esta investigación se obtuvieron; dimensiones, unidades de significado, categorías emergentes, categorías conceptuales, subcategorías conceptuales y reflexiones en relación a una práctica de cuidado que considere que la/s persona/s tiene/n derecho a conservar su autonomía y ser partícipe/s en su proceso de cuidado, desde una perspectiva ética y compartida a través de una escucha activa, compasiva, respetando los deseos, creencias y necesidad/es de la/s persona/s en su final de vida. En conclusión, el re-mirar la/s práctica/s de cuidados paliativos que se estén generando y evidenciando en escenarios institucionales donde desempeñamos nuestra profesión, nos motivó a reconocer perspectivas que consideren a la/s persona/s en forma holística con idea de transformación desde lo vivido y compartido en la cotidianeidad; también, a rescatar experiencias que serían útiles para proveer los conocimientos necesarios para una renovación ética y humanística, proporcionando una muerte tranquila, serena, compasiva, tolerable, en paz y con tan poca angustia y ansiedad como sea posible, asumiendo la trascendencia que tiene para el ser humano cerrar un ciclo vital. A modo de recomendación se propone pensar como desafío profundizar en las reflexiones que interpelan en nuestra/s práctica/s de cuidado, que pueden ser aplicables en cualquier escenario de cuidado en la vida de la/s persona/s. Considerar y repensar que la/s persona/s también sean partícipes de su cuidado, propiciando espacios para la práctica enfermera en las dimensiones toma de decisión/es, escucha y espiritualidad; donde la/s persona/s expresen sus deseos, inquietudes, virtudes y actitudes proporcionando el bienestar propio y colectivo: y donde lo/as enfermeros/as puedan reconocerse como persona/s; reconocer sus propios temores, prejuicios, actitudes positivas y/o negativas ante la/s persona/s cuidada/s. Reconocer que el cuidado compasivo comienza en uno mismo, para luego ser compasivo con los demás, ofreciendo inteligencia al servicio del amor; cuidado oportuno, acompañamiento, cercanía y permanencia en la/s persona/s cuidada/s y/o final de vida, considerando a la enfermería como gestora de recursos de cuidado.--
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